Nació en Matamoros, Tamaulipas, el 17 de junio de 1833. Presidente constitucional del 1 de diciembre de 1880 al 30 de noviembre de 1884. Murió en la hacienda de Chapingo, Estado de México, el 8 de mayo de 1893.
Se integró al ejército como soldado raso en 1853. Combatió a los liberales en la guerra de Reforma. Ofreció sus servicios a Benito Juárez durante la Intervención francesa, combatiendo bajo el mando de Porfirio Díaz. Gobernador de Palacio Nacional y comandante militar de la Ciudad de México, secundó a Díaz en las rebeliones de La Noria (1871) y de Tuxtepec (1876). Gobernador de Michoacán en 1877, secretario de Guerra y Marina en 1879. En 1880, con el apoyo de Díaz, fue electo presidente. Durante su administración impulsó la construcción de ferrocarriles y el crecimiento de la red telegráfica; asimismo fundó el Banco Nacional de México. Por otra parte, tuvo que hacer frente a una grave crisis hacendaria, reconoció la deuda inglesa y ordenó la emisión de moneda de níquel, cuyas consecuencias económicas provocaron un violento motín en la Ciudad de México. Al término de su periodo presidencial ocupó la gubernatura de Guanajuato.
Firma de Manuel González
Aunque la biografía de este político mexicano, por ser breve, no es posible que tenga mucha información, bueno sería que documentara más hechos tanto de su vida como de su gestión como presidente, especialmente las que permitieron que aún habiendo enarbolado junto con Porfirio Díaz el principio de la NO REELECCIÓN, se permitió la PRIMERA REELECCIÓN de este ultimo, lo que fue la antesala para su larga dictadura, lo que es una muestra de las incongruencias que no todos, pero sí muchos de nuestros políticos, cometen en la búsqueda del poder y la forma de favorecer sus intereses, algunos muy legítimos, pero otros no tanto.
ResponderEliminarBien dice el dicho que "el pueblo que ignora su historia" ( que incluye no sólo los aciertos, sino también los errores), "está condenado a repetirlos", algo que a los mexicanos nos ha sucedido primero con la dictadura de Santa Anna ( quien al parecer gobernaba no sólo de manera directa, sino a través de testaferros ), después con Porfirio Díaz, y aunque no tan obvia, el llamado "Maximato de Calles", después del asesinato de Obregón, quien también logró ser reelecto, aunque por su asesinato, ya no pudo ejercer dicha presidencia.